martes, 30 de marzo de 2010

Noticia: La Corriente del Golfo no se está desacelerando

Por Richard Black
BBC, Corresponsal de Medio Ambiente


La Corriente del Golfo no parece estar desacelerándose, afirmaron científicos estadounidenses que utilizaron satélites para monitorear los cambios en el mar.

En concordancia con los resultados obtenidos por otros expertos que utilizaron distintas metodologías, el equipo estadounidense descubrió variaciones dramáticas en el corto plazo, pero esto no significa que se trate de una tendencia, según aclaran.

Algunos modelos de cambio climático proyectan una desaceleración -argumento planteado en la película "El día después"- en esta corriente.

Los resultados de la investigación fueron publicados en la revista Geophysical Research Letters.

Cambios sí, tendencia no


La Corriente del Golfo es un proceso clave en el clima de Europa occidental. Empuja el calor de los trópicos hacia el norte y mantiene a países como el Reino Unido unos 4-6ºC más cálidos.

Forma parte de un movimiento de agua más amplio, la Circulación de Retorno Meridional Atlántica, que es en sí misma, uno de los componentes de la sistema global de corrientes termohalinas.

Entre 2002 y 2009, dice el equipo, no notamos ninguna tendencia, sólo muchas variaciones en períodos cortos.

Las imágenes satelitales recabadas desde 1993 sugieren un aumento pequeño en el flujo, pero los investigadores no están convencidos de que este cambio sea significativo.

"Los cambios que hemos visto en la fuerza del retorno son, probablemente, parte de un ciclo natural", afirmó Josh Willis, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la Nasa en California.

"El aumento leve del retorno desde 1993 coincide con el ritmo natural de calentamiento y enfriamiento del Atlántico".

Confusión

Las primeras observaciones que hicieron suponer que la circulación se estaba tornando más lenta salieron a la luz en 2005, como parte de una investigación del Centro Nacional de Oceanografía del Reino Unido (NOC, por sus siglas en inglés).

Tras hacer mediciones en diversos puntos del Atlántico y luego de comparar esta información con registros históricos, los investigadores notaron que el volumen de agua fría que retornaba hacia el sur parecía haber caído en cerca de un 30% en medio siglo.

Una disminución que los expertos consideraron significativa.

El agua cálida de la superficie se hunde en el Ártico y vuelve hacia el sur, por el fondo del océano, dando impulso a la circulación.

Sin embargo, observaciones posteriores hechas por el mismo equipo, dejaron en evidencia que la fuerza de la corriente varía enormemente de una estación a otra, o incluso entre períodos más cortos.

Desde 2004, los expertos no han descubierto ninguna tendencia firme.

Variabilidad

Actualmente, el equipo del NOC cuenta con una serie de instrumentos de medición en todo el Atlántico que registran información de forma continua.

"En cuatro años y medio de mediciones, hemos encontrado una gran variabilidad, y estamos trabajando para hallar una explicación", aseguró Harry Bryden, investigador del NOC.

Las cantidades de agua involucradas son enormes, con variaciones de entre 4 y 35 millones de toneladas de agua por segundo.

La investigación es parte del proyecto financiado por el Reino Unido "Rapid", que tiene como misión afinar el entendimiento sobre el impacto potencial de los grandes cambios climáticos que pueden tener lugar en períodos de tiempo corto.

El equipo de Bryden calcula que el sistema de sensores emplazado en el Atlántico es lo suficientemente bueno como para detectar cambios en el flujo de la corriente de más de 20 en el largo plazo.

Más ficción que ciencia

La idea que un ralentamiento en la Corriente del Golfo puede provocar eventos catastróficos repentinos, como por ejemplo grandes tormentas de nieve en las tierras templadas de Europa occidental y en el este de América del Norte ha sido muy explotada por Hollywood.

Ésta siempre ha sido una fantasía, como, dice Josh Willis, así como la idea de que la desaceleración de la corriente puede provocar otra edad de hielo.

Aunque éste no sea el caso, el experto enfatiza que esta corriente juega un papel importante en el clima de hoy.

"Algunos incluso sugieren que los cambios cíclicos en el flujo de la corriente pueden generar un enfriamiento y un calentamiento en el Atlántico del Norte a lo largo de varias décadas y afectar los patrones de lluvia en Estados Unidos y África e incluso el número de huracanes en el Atlántico.

Fuente: BBC MUNDO

domingo, 28 de marzo de 2010

Sistema transgénico y monocultivo: Un pobre sistema que enriquece a pocos


A la luz de los acontecimientos, tanto históricos como actuales, relatados en infinidad de documentos disponibles y dados a conocer a través de la información suministrada por instituciones y organismos dedicados a la investigación del tema, el sistema transgénico de producción agraria no ha sido del todo benigno ni ha aportado los beneficios prometidos para satisfacer las necesidades crecientes de alimentación de la población mundial en la medida en que se requiere; sin que el costo ambiental y humano supere sus cuestionables bondades.

Más allá de la composición y de los atributos científicos de los cultivos transgénicos, sus bondades o defectos, creo que el principal problema anexo a este sistema estriba en el uso y abuso por parte de los grandes conglomerados empresariales, que anteponen sus intereses monetarios desmedidos en detrimento del bienestar social y del derecho de la gente de gozar de un medio ambiente que le permita su desarrollo integral como parte activa de este mismo.

Los beneficios monetarios que representan para los grandes terratenientes el monocultivo de soja o maíz, destinados principalmente para la exportación, se anteponen a las necesidades alimentarias de países como los latinoamericanos, que teniendo gran capacidad de producción de variedades agrícolas constituyentes de la dieta básica y tradicional de sus habitantes, entran en el espiral de escasez y de empobrecimiento casi generalizado de la población.

La deforestación, la degradación de la capacidad productiva de los suelos, el hambre, la desnutrición infantil, el creciente índice de malformaciones en los recién nacidos, la contaminación hídrica de fuentes de consumo domestico, la contaminación atmosférica de zonas aledañas a los monocultivos transgénicos, son algunas de las más puntuales evidencias y consecuencias de la practica sistemática y extendida de fumigación con herbicidas y plaguicidas de alto poder para garantizar el máximo aprovechamiento de la especie cultivada.

La concentración de la propiedad y de la capacidad de producción en pocas organizaciones (o pocas manos) socava la posibilidad de acceso de la población más necesitada y de escasos ingresos, a los beneficios de una adecuada alimentación, en primera instancia, por los altos costos de los alimentos básicos propiciados por su disminuida producción ante el repunte de los monocultivos de soja y maíz, y en segunda instancia por el bajo contenido nutricional de los alimentos a los cuales pueden acceder, ya sea por las características propias de los mismos o por la pérdida progresiva de la capacidad productiva de los suelos en los que se cultivan.

La creciente expansión de las áreas de monocultivos transgénicos ha generado el desplazamiento de la población rural hacia los centros urbanos en busca de mejores alternativas para subsistir, objetivo utópico dada la creciente proporción de miseria y de pobreza como consecuencias del alto índice de desocupación y subempleo que agobia a las grandes ciudades de esta parte del planeta. La presión que ejerce en los sectores rurales la creciente expansión de la frontera productiva de cultivos transgénicos, desarticula la endeble estructura social de la población latinoamericana transfiriendo problemas del campo a la ciudad y acrecentándolos en la medida en que las soluciones no aparecen.

Con el actual modelo agroalimentario no se va a lograr el objetivo de alcanzar la seguridad alimentaria para la creciente población mundial. No es más que un modelo dominado por grandes conglomerados empresariales transnacionales que controlan las tecnologías y todos los eslabones relacionados con la cadena de suministros, desde el capital financiero hasta la distribución final.

Se requiere un nuevo modelo incluyente, equitativo en la distribución de los beneficios y soportado sobre bases sustentables que permita el desarrollo de las generaciones actuales y futuras.

Nelson Vásquez Castellar

martes, 23 de marzo de 2010

Día Meteorológico Mundial 2010


60 años al servicio de su seguridad y bienestar

23 de marzo de 2010

Todos los años, el 23 de marzo, la Organización Meteorológica Mundial, sus 189 Miembros y la comunidad meteorológica internacional celebran el Día Meteorológico Mundial con la elección de un tema oportuno. Este día conmemora la entrada en vigor, en 1950, del Convenio por el que se estableció la Organización. Posteriormente, en 1951, la OMM fue designada organismo especializado del sistema de las Naciones Unidas.

El tema de este año es "60 años al servicio de su seguridad y bienestar".

Mensaje a la comunidad meteorológica mundial con motivo del 60° Aniversario de la OMM

Con motivo del 60° aniversario de la Organización Meteorológica Mundial, quisiera rendir tributo a la comunidad meteorológica que trabaja incesantemente más allá de las fronteras para proteger y salvar vidas, hogares y medios de vida. Quiero agradecer especialmente a todo el personal de los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales y a todos los voluntarios que con su generosidad y dedicación contribuyen a hacer realidad nuestro trabajo.
Estoy convencido de que la labor de la OMM, y de sus Miembros, al servicio de la humanidad será, si cabe, más importante en los decenios venideros. Esta posibilidad se la debemos a toda una serie de generaciones de meteorólogos e hidrólogos de todo el mundo. Vaya a todos ellos nuestro agradecimiento.

Michel Jarraud

OMM